La parábola de la barba de Rajoy

Año 2052, en algún lugar del mundo , un abuelo, antiguo joven aventurero, y su nieto de 10 años, repasando la lección de Grandes Catástrofes del S.XXI ...

-          Abuelo, ¿quién fue Mariano Rajoy?

-          Rajoy, fue el primer y último presidente de la democracia española con barba.

La democracia parlamentaria fue una creencia social colectiva en la cual se creía que el pueblo tenía el poder, a través del sufragio, en el cual la gente votaba a gente que no cumplía ni una de las cosas que prometía.

Pero déjame que te cuente la parábola de la barba de Rajoy…

Cuando las personas se dejan barba lo hacen por muchas razones, la barba de Rajoy era un mecanismo de defensa para ocultarse, aparte de hacerlo por unas cicatrices producidas por un desafortunado accidente.

Rajoy se dejaba crecer la barba para ocultar la verdad, para no mostrarse ante el mundo tal y como era, la cabeza de turco de una clase de políticos carcamales en sus últimos coletazos, que miraban por sus beneficios particulares y por las de sus padrinos.

Un día tuvo un sueño, en el cual un genio le profetizó que si recortaba iban a salir de la crisis, así lo hizo, Rajoy empezó a recortar en derechos fundamentales, sanidad, pensiones... 

Rajoy no recortaba,  Rajoy hizo un afeitado Gillete a toda la sociedad española, no dejó ni un pelo. 

Lo que no entendió Rajoy que lo que tenía que recortar era su barba, para quitarse la máscara, ser natural. . No se le pedía volver a tiempos de bonanza, pero al menos que dijera la verdad y que no se escondiera en la demagogia barata de sus rígidos discursos paja, aprendidos de memoria, llenos de palabrería absurda

A cada mentira, se le hacía una mueca en la cara y la barba cada vez se le hacía más blanca, cuentan que empezó a mentir tanto que se tintaba la barba pero al día siguiente ya la tenía completamente blanca.

Pero no hay barba que dure 1000 años, así que también se le empezó a caer y con ella todos los que rodeaban su cuerpo triste, desnudando cada una de sus mentiras, hasta quedarse completamente solo.

En España lo teníamos todo, se comía bien, había gente inteligente, con ideas y esperanzas , con futuro, gente que trabajó todas sus vidas y que acabó sin nada al desaparecer el estado del bienestar si es que existió algúna vez.

 

La verdad es que Rajoy hubiera hecho lo que fuera por todos aquellos que estaban por encima de él, como el perro que lleva la pelota a su amo, sin saber muy bien porque. 

Mejor el recortar y afeitar los derechos de todos aquellos en situaciones de necesidad...

Por ellos Rajoy nunca habría dado ni un pelo de su barba.